Su trabajo recodifica elementos del sistema capitalista para convertirlos en mitos de resistencia multiespecie. Mediante proyectos multidisciplinarios, que reúnen la investigación experimental etnobotánica con prácticas de curación, la artista propone una visión poética de la vida contemporánea, profundamente ligada a la tierra y a los saberes espirituales. En su obra, materializada en dibujos, esculturas, instalaciones y videos, plantea a la imaginación artística como forma de emancipación psíquica y como camino de curación del trauma colonial. Esta operación surge de la investigación sobre las implicaciones de la huella colonial en Sudamérica y en su vida personal.